PATO

Fragmento de mi libro SIGMA

No eres un gánster. Si estás leyendo este libro probablemente no lo seas. Lo más probable es que seas un hombre que apenas y tiene influencia sobre su propia vida. Cuando estás en esta posición, sin aliados, sin esfera de influencia, sin poder, es muy probable que todos te quieran hacer su víctima. Un hombre sin una tribu y sin un propósito trascendental es muy fácil de manipular. Allá afuera hay depredadores de todo tipo, los políticos, los dueños de los casinos y las apuestas por internet, los creadores de las altcoins, los psicólogos, los bancos, las productoras porno, los ladrones callejeros, las estafadoras de Tinder, las golddiggers, etc. Debes evitar a toda costa convertirte en su pato. Sé escéptico, aprende a escuchar atentamente, ¿Cómo esta persona o grupo se están aprovechando de mí? No seas el pato de nadie, no te acostumbres a dejarte robar, estafar, mentir, engañar. Muchos lloran por su ex que los engañó ¿es que acaso extrañas que te engañen? El hombre sigma surge de un ratón, de un ser indefenso y que apenas y sobrevive escondiéndose en las cloacas, pero se convierte en un zorro, astuto, audaz, escurridizo, con el dolor y la experiencia. El hombre sigma debe poder entremezclarse entre las rendijas de la sociedad y entender a profundidad sus varios mecanismos, pero nunca verse atrapado en ellos. La diferencia entre un pato y un zorro es abismal, atraviesa ese abismo. Desconfía de cada hombre y cada mujer que conozcas. No seas rápido en aceptar gente nueva en tu círculo, escanéalos bien, escucha a profundidad lo que te dicen. Si escuchas con suficiente concentración absolutamente todos te dicen lo que necesitas saber. Aquella mujer que te traicionó, seguramente alguna vez te avisó que lo iba a hacer, sólo que lo ignoraste, no supiste escuchar, no pusiste atención. Esa es la clave para ser un zorro: pon atención. El pato, ensimismado en quién sabe qué pensamientos, es fácilmente agarrado por sus depredadores. Las orejas del zorro nunca dejan de moverse, tratando de captar el mínimo sonido, siempre alerta y prevenido. Tal vez la regla más importante para no ser el pato de nadie es: nunca sueltes plata.

“Permito la manipulación para descubrir a dónde mi enemigo quiere que vaya. Luego uso mi mente para romper la trampa y castigar a los perpetradores”

Emory Tate

Este fue un fragmento de mi libro SIGMA: MENTALIDAD PARA UN MUNDO CAÓTICO

si quieres leerlo en pdf o escucharlo en audiolibro y cambiar tu mentalidad,responde a este mail la palabra SIGMA y te paso información para que lo cheques

un abrazo

atte. Tu hermano mayor

Iván Barca