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ABRIDOR CON JUEGO
Descubre cómo esta técnica puede cambiar tus interacciones con las mujeres

“hola, estás linda” felicidades eres igual que el 99% de los hombres que le han hablado
¿Te ignoran las mujeres?
Obvio.
Si dices lo mismo que el 99% de los hombres, ¿Qué esperas?
"Hola, estás hermosa."
"¿De dónde eres?"
"¿A qué te dedicas?"
Puras frases muertas, sin vida.
Así hablas si quieres ser olvidado, si te conformas con ser uno más del montón.
Ahora imagina esto:
"No sé por qué, pero me recuerdas a mi mascota favorita."
¿Le estás diciendo que es adorable? ¿le estás diciendo que parece perro?
No se sabe! es AMBIGUO
"Tienes pinta de alguien creativa. ¿Segura no le haces a las drogas?"
Divertido, cool, no agresivo
La diferencia es brutal.
Las frases comunes te coloca como otro pendejo que busca validación.
La otra te convierte en el hombre que despierta curiosidad.
Cuando afirmas algo ambiguo sobre ella, proyectas algo que pocos hombres tienen:
Confianza.
Audacia.
Dominio.
JUEGO
Dejas de mendigar su atención y empiezas a controlar la interacción.
te metes en su cabeza
Ella no necesita explicarte quién es de forma lógica
cuando tiene que descifrarte la obligas a sentir algo
No más preguntas aburridas.
No más "qué linda estás" como si nunca hubieras visto a una mujer bonita.
Si dudas, pierdes.
Si afirmas, ganas.
Si generas una duda en su mente alimentas la conversación
No importa si fallas.
Ella te corregirá, pero no desde el rechazo, sino desde el interés.
¿Por qué?
Porque hablas con convicción, porque no muestras necesidad,
porque proyectas el valor de un hombre que observa, lidera, y está acostumbrado a hablar JUEGO el idioma de las mujeres
Las mujeres no quieren a un espectador.
Quieren a alguien que llegue, marque el paso y domine el terreno.
Y eso no lo hace el hombre que pregunta "¿A qué te dedicas?"
Lo hace el que afirma:
"Tienes algo que me dice que trabajas en algo fascinante, pero ganas muy poco"
Adivina, se ambiguo, genera misterio.
Porque los hombres que preguntan aburren.
y los que la dejan dudando la excitan
Haz la prueba.
Mírala a los ojos.
Afirma algo inesperado.
Y cuando veas esa chispa de intriga en su mirada, sabrás que entraste en su mente.
Hoy dejas de ser un espectador.
Hoy decides ser el protagonista.
un abrazo
atte. Tu hermano mayor
Iván Barca